Los retos en las agroexportaciones españolas persistirán en 2024.
En un inicio se esperaba que el 2023 fuera un año complicado para el sector agroalimentario español, pues venía precedido de una disminución del 10.4% en las exportaciones de frutas y hortalizas frescas durante 2022; sin embargo, había una ligera esperanza de que la situación mejorará.
Pero 2023 no comenzó de buena manera, con una caída del 9.5% durante enero, en comparación con enero de 2022, y terminando con una reducción del 7.8% durante el primer semestre. A pesar de esto, incluso cuando el volumen se redujo, el valor de las exportaciones aumentó un 7%, lo que “salvó” al sector.
Además, hasta noviembre de 2023 la caída anual acumulada en comparación con 2022 ya era del 10.5%, con una reducción en los envíos de frutas y hortalizas del 13% y 7%, respectivamente.. Y el valor acumulado de las exportaciones de frutas, también hasta noviembre, cayó un 3.5%, mientras que el de hortalizas creció un 8%.
Paralelamente, las importaciones aumentaron significativamente tanto en volumen como en valor. Las importaciones de hortalizas tuvieron un aumento del 14%, con un incremento en valor del 32%. Por su parte, las importaciones de frutas aumentaron 1%, con un incremento del 9% en valor.
Los retos que afronta el sector hortofrutícola español
Los retos que está enfrentado el sector incluyen diversos factores, entre los que destacan:
- Condiciones climáticas adversas: La sequía que afectó a España en 2022 y continuó en 2023 ha sido un factor determinante. Las altas temperaturas registradas en otoño y un invierno inusualmente cálido contribuyeron a un descenso en la producción, especialmente en febrero. Esta situación ha llevado a una reducción significativa en los cultivos, incluyendo frutas y verduras, lo que anticipa una escasez de productos locales.
- Competencia desleal con productos importados: Los productores españoles han enfrentado lo que consideran una competencia desleal por parte de países fuera de la Unión Europea. Estos países no están sujetos a las mismas regulaciones fitosanitarias que se aplican a los productores de la Unión Europea, lo que permite que sus productos sean a menudo más baratos y, en algunos casos, más eficientes en términos de producción. Esto ha llevado a un crecimiento en las importaciones de frutas y verduras tratadas con productos prohibidos en la UE, lo que disminuye la competitividad del modelo de producción comunitario.
- Desafíos en la cadena de suministro: Con la globalización y el auge de la compra en línea, la demanda de transporte de productos ha aumentado considerablemente. El sector se enfrenta a retos como encontrar socios logísticos adecuados, reducir el impacto medioambiental de las operaciones y mantener la calidad de los productos durante todo el proceso logístico.
La agroindustria española necesitará capacidad de respuesta en 2024
Todavía ninguna institución u organismo ha publicado cifras sobre sus perspectivas para el sector hortofrutícola español durante 2024, pero queda claro que se requiere impulsar iniciativas que tengan un enfoque en fortalecer la competitividad del sector mediante la innovación, para afrontar y superar con éxito los desafíos actuales.
En este sentido, la Plataforma de Comercio de ProducePay surge como una alternativa innovadora y eficiente para los distribuidores dentro de la agroindustria española. Esta plataforma ofrece un espacio único donde los miembros pueden interactuar directamente, facilitando transacciones más rápidas y seguras.
Al utilizar herramientas tecnológicas avanzadas, ProducePay ayuda a optimizar la cadena de suministro, mejorando la visibilidad del mercado y proporcionando datos valiosos para la toma de decisiones. Esto no solo potencia la solidificación de los negocios existentes, sino que también abre puertas a nuevas oportunidades comerciales, lo que es crucial para mantener la competitividad y el crecimiento sostenible del sector hortofrutícola español en 2024 y más allá.
Fuentes: Agro News Comunitat Valenciana, FEPEX